Glaucoma

El glaucoma es una enfermedad degenerativa del nervio óptico relacionada con aumentos en la presión intraocular. Este trastorno puede ser congénito, pero en la mayoría de ocasiones se adquiere a lo largo de la vida. Existe una elevada predisposición racial, siendo una patología que se observa especialmente en razas como Cocker Spaniel, Basset, Beagle, Perro de Aguas, Boston terrier o Bulldog Francés.

La presión intraocular viene determinada por la presencia de un fluido intraocular denominado humor acuoso. Este fluido se forma en los procesos ciliares detrás del iris, pasa a la porción anterior del ojo a través de la pupila y sale del mismo por el ángulo iridocorneal. El equilibrio entre la formación y su salida del ojo es fundamental para el mantenimiento de una correcta presión intraocular.

En ocasiones, el glaucoma aparece por anormalidades en el desarrollo del ángulo iridocorneal (glaucoma primario), pero en otras, aparece de forma secundaria a otros procesos, como inflamación, hemorragia, catarata, luxación de cristalino (glaucoma secundario)…

Figura 1. Esquema drenaje humor acuoso. Manual de Oftalmologia del perro. Fernando Sanz Herrera.

El glaucoma es una enfermedad dolorosa y suele acabar con la visión del ojo afectado si no se establece un tratamiento adecuado.

En casos agudos, el ojo puede presentar enrojecimiento y dolor. La córnea adopta un aspecto azulado y la pupila suele estar dilatada.  El ojo puede dejar de funcionar. En casos crónicos, el aumento de presión provoca el aumento de tamaño del globo ocular. Frente a estos signos clínicos es fundamental la actuación veterinaria para evitar la pérdida irreversible de la visión.

Figuras 2 y 3: Perro con glaucoma agudo en ojo izquierdo donde se observa la pupila dilatada, el enrojecimiento del ojo y el color azulado del mismo.

El tratamiento tiene dos vertientes: el médico y el quirúrgico. El primero consiste en la utilización de fármacos que disminuyan la formación del humor acuoso y en el uso de principios activos que faciliten la salida del mismo. Las opciones quirúrgicas están dirigidas en la misma dirección: básicamente, la destrucción mediante laser del tejido donde se forma el humor acuoso o la facilitación de la salida del mismo del globo ocular mediante gonioimplantes. En ojos ciegos, los procedimientos quirúrgicos son paliativos y tienen como objetivo acabar con el dolor.

Figura 4. Perro operado de glaucoma con un gonioimplante valvulado .

Autor

Joan Quesada

Joan Quesada

  • Licenciado en veterinaria por la UAB.
  • Diplomado en Oftalmología Veterinaria  por la UAB y por ESAVS
  • Miembro de la ESVO